El grafeno es una sustancia que está formada por carbono puro y que sigue una estructura hexagonal muy similar a la de los paneles de las abejas. Fue descubierto por el ganador del premio Nobel 2010 en Física Andre Geim y Konstantin Novoselov.
Lo cierto es que este sorprendente material está llamado a encabezar la revolución tecnológica del siglo, en gran medida gracias a su aplicación a áreas tan diversas y distintas como fotografía, medicina o la electrónica.
En lo que respecta al área de la electrónica, el grafeno mejoraría los circuitos integrados que forman cualquier dispositivo electrónico y permitiría contar con microprocesadores más veloces, flexibles y pequeños.
La principal característica del grafeno es que permite crear pantallas flexibles que pueden ser guardadas en cualquier sitio sin ocupar apenas espacio. Las pantallas hechas de grafeno precisan menor cantidad de energía y recursos en su fabricación gracias a que es, además, un material más ecológico. Se trata de pantallas táctiles con una vida útil casi ilimitada.
Paulatinamente se están realizando avances significativos en el desarrollo de las pantallas de grafeno ya que todo hace indicar que el futuro está ahí. Esta afirmación se basa en gran medida en que el uso de dispositivos móviles sigue un ritmo creciente, lo que exigirá a su vez que los procesos de creación de las pantallas sean cada vez más verdes.
Un estudio conjunto de las Universidades de Manchester y Sheffield ha dado como resultado un nuevo desarrollo que permitirá crear LEDs basadas en grafeno. El resultado de este estudio consiste en un dispositivo semitransparente compuesto de LEDs basados en grafeno que podrían constituir la base de una futura generación de móviles, tablets y televisores flexibles.
El grosor del producto resultante está entre los 10 y los 40 átomos, por lo que se trata de un semiconductor extremadamente fino. Aunque es aún un prototipo, cuenta con la suficiente estabilidad como para permitir aventurar sus posibles usos comerciales en unos años.
También en la Universidad de Manchester se ha desarrollado una bombilla de grafeno que según está previsto salga a la venta este mismo año y que consumirá un 10% menos que los actuales LEDs.
En palabras de Colin Baley, Vicerrector de la Universidad de Manchester, “la bombilla de grafeno utilizará menos energía y se espera que dure más tiempo”. También aseguró, además, que los costes de fabricación son inferiores y que los componentes utilizados son más sostenibles.
Hasta el momento, la bombilla de grafeno es la primera aplicación comercial que ha emergido del Instituto Nacional del Grafeno del Reino Unido (NGI). No obstante, se espera que el grafeno permita a largo plazo la obtención de formas más ligeras y eficientes de transporte. A más corto plazo, podremos ver su aplicación en Smartphones, portátiles, smartwatches, etc. Gracias al grafeno podemos imaginar un futuro con teléfonos inteligentes flexibles y transparentes, aviones más ligeros.
También en el ámbito de la arquitectura y la construcción está llamado a convertirse en un material revolucionario. En este sentido, las principales aplicaciones estarían en torno a los aislamientos y equipos de alta eficiencia, recubrimientos de óxido de titanio y la fabricación de paneles solares.
¿Qué nos impide pensar que en un futuro, quizás no demasiado lejano, las pantallas de digital signage que encontramos por las ciudades estén hechas a partir de grafeno?
Leave a Comment